Economía
¿Maíz rentable en Castilla y León? Cuentas ajustadas al final de campaña
La campaña de cosecha de maíz en Castilla y León encara su recta final con varios aspectos clave: el regadío ha operado con normalidad tras un inicio de primavera con reservas récord en la cuenca del Duero. Las lonjas provinciales han establecido un precio en origen que oscila entre 200 y 215 euros por tonelada, según la plaza. La recolección se ha adelantado de forma inusual, con niveles de humedad que, en muchas fincas modernizadas, permiten evitar o reducir el secado, aliviando costes en un año de márgenes ajustados.
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) informó el 11 de abril que las reservas alcanzaban el 90,7% de su capacidad y aprobó los volúmenes mínimos para el final de campaña. En paralelo, la Lonja de León marcó 215 euros/t para el maíz «destino secadero» el 15 y el 22 de octubre. La Junta de Castilla y León cifró la superficie de maíz declarada en la PAC 2025 en 124.012 hectáreas, 7.240 más que el año anterior, un aumento del 6,2%.
Donaciano Dujo, presidente de Asaja Castilla y León, resume la campaña: las hectáreas de maíz en Castilla y León aumentaron a 124.000 este año. Añade que el estado sanitario del maíz ha sido bueno y las producciones también, con un promedio de alrededor de 13.000 kilos por hectárea en Castilla y León.
Los datos de mercado respaldan la estabilidad en precios. La Lonja Agropecuaria de León fijó el 22 de octubre un precio orientativo de 215 euros por tonelada para el maíz destino secadero, repitiendo cotización. Desde la Alianza UPA-COAG en Castilla y León, Lorenzo Rivera detalla cómo el agua disponible y la modernización del riego han influido en los rendimientos, destacando diferencias significativas entre zonas modernizadas y no modernizadas.
En términos de costes y rentabilidad, las organizaciones agrarias coinciden. Dujo subraya los sobrecostes por fertilizantes, gasóleo, fitosanitarios, semillas, agua y secado. Rivera coincide en que los fertilizantes y el riego son los capítulos más pesados, advirtiendo que a 210 euros la tonelada solo libran costes quienes superen los 18.000 kilos de producción.
Dujo pone el foco en el regadío como cortafuegos rural y blindaje climático, mientras Rivera reclama ordenar el flujo de importaciones para estabilizar los precios de los cereales.
Además, el contexto nacional apunta a una campaña de primavera con más superficie de maíz respecto a 2024 y producciones al alza, según el Ministerio de Agricultura. En la región, las reservas han permitido una campaña de riego sin restricciones generalizadas.
En el tramo final de campaña, Dujo remarca la preferencia por reducir costes y Rivera advierte de las posibles consecuencias de las lluvias de finales de octubre. Ambos coinciden en la importancia de la modernización, la energía barata y un mercado que valore el origen regional para sostener el sector.
