Medio Ambiente

Aemet pronostica un otoño más seco y cálido de lo normal tras el segundo verano más caluroso desde 1961

Aemet pronostica un otoño más seco y cálido de lo normal tras el segundo verano más caluroso desde 1961
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anticipa un otoño más seco y cálido de lo habitual en Castilla y León. Para el trimestre de septiembre, octubre y noviembre, existe una probabilidad del 45% de que sea seco, mientras que la posibilidad de registrar temperaturas más altas se eleva a entre un 60% y un 70%. Se espera que el suroeste de la Comunidad sea la zona más perjudicada por la escasez de precipitaciones. Este pronóstico se presenta tras un verano calificado como “extremadamente cálido” en la región, con una temperatura media de 21,5 grados, lo que supone una anomalía térmica de 2,2 grados por encima de lo normal. De hecho, ha sido el segundo verano más caluroso desde 1961, solo superado por el de 2022, cuya anomalía fue una décima superior. El periodo estival se caracterizó por valores diurnos “extremadamente cálidos”, con una anomalía de 2,7 grados, y mínimas que también superaron la media en 1,8 grados. Además, se registraron dos olas de calor: una entre el 28 de junio y el 2 de julio, y otra entre el 3 y el 18 de agosto. Manuel Mora, delegado territorial de la Aemet en Castilla y León, aseguró que estas altas temperaturas han provocado que casi todas las provincias registren “numerosas” efemérides diarias, mensuales y trimestrales. Como ejemplo, señaló que hubo 77 días con máximas iguales o superiores a 25 grados (frente a los 66 habituales) y 55 días por encima de los 30 grados (cuando lo normal son 35). El registro máximo de la Comunidad fue de 43,4 grados en Candelada (Ávila) los días 12 y 16 de agosto, y la mínima de 2,2 grados se registró en Cuéllar (Segovia) el 21 de julio. En cuanto a los observatorios principales, destacan los 2,8 grados de diferencia en Ávila, los 2,7 en Zamora, los 2,6 en Segovia y los 2,5 en Ponferrada y Valladolid. El verano también fue “muy seco” en el suroeste y norte, y “extremadamente seco” en el centro y este, con una precipitación media un 31% inferior a lo normal. En este contexto, el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales, afirmó que España se encuentra en un escenario de “emergencia climática incuestionable”, con fenómenos extremos que se suceden “con mayor intensidad, frecuencia y alcance”. Por ello, valoró la aprobación del Pacto de Estado frente a la emergencia climática, un compromiso para “anticipar, proteger, actuar de manera unida y coordinada y recuperarse después de los daños causados”. Para esta semana, Mora prevé una situación anticiclónica con cielos despejados y un aumento progresivo de las temperaturas, que alcanzarán los 35 y 36 grados a partir del miércoles. Este episodio durará hasta el sábado, cuando se espera un cambio “brusco” con un descenso de siete u ocho grados y probables tormentas. Con el calor de estos días, el peligro de incendios forestales volverá a ser “muy alto” o “extremo”.